En esta nota compartimos la entrevista que realizamos con Almendra Murillo, instructora de manejo en Honda Motors de Argentina, en ocasión del cierre del programa «Alas en movimiento». Los invitamos a estuchar la charla.
“Alas en Movimiento”, organizado por el Departamento de Safety de Honda Argentina junto con la comunidad “Mujeres al Volante”, concluyó la primera edición del programa —realizado en el marco del Mes de la Mujer— con 17 mujeres de la zona de Campana que aprobaron el examen para obtener la licencia de motocicleta. Esta iniciativa, integral y gratuita, fue un éxito, ya que les brindó la oportunidad de aprender a conducir de forma segura y potenciar sus oportunidades laborales.
El programa incluyó tanto clases teóricas como prácticas. En los módulos teóricos, las participantes abordaron temas esenciales para la conducción segura, como el conocimiento de la moto, primeros auxilios, control de alcoholemia, vestimenta adecuada, y mecánica básica de motocicletas, a cargo de Almendra Murillo, Instructora de Honda Motor de Argentina. Además, contó con talleres de manejo emocional, dirigidos por Luly Dietrich, para fortalecer la confianza y el desarrollo personal de las participantes.
«Alas en Movimiento es un programa social que creamos en Honda junto con Mujeres al Volante, esta comunidad de mujeres tan reconocidas. El programa surgió a raíz de tantos años en que nosotros veníamos trabajando en conjunto con este equipo de chicas, en cursos que hacíamos con el Gobierno de la Ciudad. El año pasado no tuvimos cursos y surgió la necesidad de querer hacer algo propio, algo que fuera un programa nuestro, que nosotros tuviéramos la iniciativa, el material y las cosas para poder realizarlo; que fuera exclusivo y que podamos darle nuestra impronta.»
«Este fue un programa único y nuevo, porque no fue solo enseñarle a manejar las motos a las chicas. Al asociarnos con Mujeres al Volante, nosotros dimos la capacitación teórica y práctica sobre manejo de motos, pero también a este programa se sumaron talleres de ‘Manejá tu cabeza’, para aprender a manejar los miedos, ya que el miedo es un factor fundamental a la hora de aprender a andar en moto.»
El módulo práctico del programa se realizó en la pista de Honda en su planta de Campana, en donde las mujeres tuvieron la oportunidad de familiarizarse, de forma personalizada, con motocicletas como NAVI y Wave, bajo la supervisión y guía de Martin Montenegro y Ramiro Vargas, integrantes de Safety Argentina, quienes contaron con la colaboración de instructores de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y del Concesionario Genaro Motos S.A. Durante los ejercicios prácticos, las participantes trabajaron específicamente en ganar confianza al manejar, enfrentando de manera gradual los desafíos asociados a la conducción de una moto.
«Me permitiría decir que, en el caso de las mujeres, a pesar del tiempo que ha pasado y que las mujeres manejamos hace un montón, el miedo a manejar la moto, el auto, el camión, la camioneta, lo que fuere, muchas veces se presenta como el primer impedimento. ‘Le tengo miedo a la calle’ o ‘tengo una influencia que me dice: tené cuidado’. Entonces, creo que vencer ese miedo —en este caso el símbolo es la moto— es como un cambio rotundo en la vida.»
Un componente clave del programa fue el acompañamiento para la aprobación del examen. En este sentido, la Subsecretaria de Seguridad y Prevención Ciudadana del Municipio de Campana y Dirección General de Tránsito se acercaron a la planta de Honda para realizar los exámenes a las participantes, lo que añadió un valor significativo al proceso. Al final, 17 mujeres aprobaron el examen, lo que marcó un hito en sus vidas, brindándoles mayor autonomía y abriendo nuevas oportunidades laborales.
«Nosotros hacíamos cursos para aprender a andar en moto y, analizando las inscripciones, veíamos que siempre eran hombres los que venían. Entonces decíamos: ¿qué pasa acá? ¿No hay interés de las mujeres en querer aprender? No podíamos entender por qué no se anotaban, y empezamos a hacer estudios y estadísticas. No era que no había una necesidad o ganas de querer aprender, sino que no se animaban a aprender rodeadas de hombres. Ahí surgió la idea de realizar cursos exclusivos para mujeres, y en el primer curso que hicimos aquí en Honda, triplicamos las inscripciones. O sea, fue un furor. Es un taller donde les enseñan a las chicas a silenciar a esa persona que tenemos en la cabeza que nos reprime y nos hace no poder continuar. Eso es fundamental a la hora de aprender a andar en moto.»
